El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, sembró dudas ayer sobre la adjudicación del proyecto de la ampliación de la depuradora capitalina llevada a cabo por el Estado, que ha supuesto que se haya adjudicado por un 31% menos del valor estimado en el proyecto.

En este caso, el regidor recordó que el presupuesto fijado para el proyecto de ampliación de la instalación alcanzó los 32 millones de euros, aunque finalmente se adjudicó por unos 21 millones. Al respecto, no quiso hablar en ningún momento de que se haya producido una baja temeraria, aunque, por lo que espera que no esto "no suponga una merma de calidad o de alargamiento de plazos" para poner en funcionamiento la depuradora en unos tres años.

"Está en manos del Gobierno Central que se ejecute la ampliación de las instalaciones"

En el ámbito de la sede capitalina, José Manuel Bermúdez aseguro que en estos momentos "está en manos del Gobierno Central que se ejecute la ampliación de la depuradora de Santa Cruz", una instalación que recoge también las aguas residuales de los municipios de La Laguna y El Rosario y que ya en los años 70 vio cómo no era capaz de asumir el exceso de capacidad que se le incorporaba.

Respecto al vertido al mar que se produjo la semana pasada en La Hondura, recordó que se ha iniciado un procedimiento de investigación a Emmasa y hasta que no culmine en un par de semanas no se sabrá si se pondrá alguna sanción.

Bermúdez dijo que se trató de una avería, pero hay que conocer dónde se produjo y de quién es responsabilidad y en el caos que existiera se iniciaría un expediente sancionador.