La AV Azorín reiteró ayer la preocupación de los vecinos por el problema social de las personas sin hogar, un asunto que se ha convertido en el gran caballo de batalla del colectivo ante la falta de soluciones por parte de la administración.

Los exteriores del pabellón Pancho Camurria volvieron a convertirse en el paraguas de varias personas que escogieron sus rincones para montar sus casetas de campaña o montar sus tinglados a base de mantas y cartones.

Por si fuera poco, miembros del colectivo vecinal alertaron de la ocupación de varios locales frente al entorno del albergue municipal. En este caso, desde hace unas semanas varios "sin techo se han resguardado en el interior entre basuras y ratas. Aquello más bien es una zona de guerra por el estado en el que se encuentran esos huecos", explicó uno de los denunciantes.

Cansados de que el barrio siga sufriendo la imagen de personas "tiradas en la calle" y sin que se haga nada por ellos "salvo mandar la Policía Local o enviarlos al albergue municipal, que por cierto está más que saturado", la representación de parte de los vecinos del enclave de Azorín demanda una actuación integral que minimice el problema de los individuos que se encuentran en la calle ocupando los espacios de los vecinos como el Pancho Camurria o el parque Manuel Castañeda, "por el que ya no podemos pasar ni llevar a nuestros niños", y los locales que se encuentran en las proximidades del albergue.