La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Santa Cruz aprobó en su última reunión el proyecto técnico para la rehabilitación de la Casa Mascareño, una actuación que cuenta con un presupuesto base de licitación de 953.918 euros y que permitirá la reforma integral de un inmueble catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC).

El alcalde, José Manuel Bermúdez, enmarcó el proyecto en el ambicioso programa de rehabilitación del patrimonio histórico de Santa Cruz y destacó que las obras permitirán, por un lado, la preservación de este bien inmueble y, por otro, su puesta a disposición de los vecinos del barrio de La Salud y de su ámbito de influencia.

El concejal de Infraestructuras, José Alberto Díaz-Estébanez, explicó ayer que la decisión de la Junta se produce después de que la unidad de Patrimonio Histórico del Cabildo haya emitido un informe favorable de las obras que se llevarán a cabo.

Una vez rehabilitada, la Casa Mascareño se convertirá en Casa de la Juventud, con lo que la ciudad ganará nuevo equipamiento de servicios para este sector de la población, al igual que se ha hecho con la Casa Siliuto, en El Toscal.

Díaz-Estébanez subrayó que la propuesta ha sido consensuada con los vecinos de la zona, que han planteado diversas sugerencias en las reuniones mantenidas en los últimos meses. También se han expuesto paneles del mismo con ocasión de la jornada de Distrito Joven celebrada recientemente en La Salud.

Una vez que se licite y adjudique la obra, el plazo de los trabajos es de 18 meses, a partir de su inicio efectivo.

La premisa básica del proyecto es la recuperación y potenciación de los valores que su arquitecto original, José Blasco, confirió a la casa. Así, se contempla la recuperación de los volúmenes originales y la demolición de los cuerpos que fueron añadiéndose al conjunto con posterioridad. También se repondrán las carpinterías interiores y exteriores y los pavimentos contemplados originalmente.

De acuerdo con el proyecto técnico aprobado, la Casa dispondrá, en sus tres plantas, de espacios de ensayo y de grabaciones musicales y de baile; zonas polivalentes y salas para informática o talleres.

La Casa Mascareño fue declarada Bien de Interés Cultura (BIC), con categoría de Monumento, en julio de 2008. Emplazada entre la avenida Venezuela y la calle Fermín Morín, la casa habría de ocupar el centro de una de las manzanas resultantes del nuevo trazado del barrio de Buenavista.