Los examinadores y la Dirección General de Tráfico (DGT) acercan posturas y, tras el primer paro de 24 horas de los primeros, que ayer registró un seguimiento desigual, la posibilidad de llegar a un acuerdo se ve más cerca por ambas partes.

Convocados por los sindicatos CSI-F y CGT, cerca de un centenar de examinadores acudieron a la sede central de la Dirección General de Tráfico (DGT) para concentrarse y demandar mejoras laborales, entre ellas un incremento salarial, medidas de seguridad para evitar las agresiones de las que son objeto y una reorganización de la carga de trabajo.

Bajo pancartas en las que podía leerse "Examinadores de la Decepción General de Trabajadores", "En defensa de lo público" o "María Seguí, vamos a seguir así", examinadores de toda España se desplazaron a Madrid y protagonizaron una gran pitada ante la DGT.

Desde el 14 de septiembre, el colectivo, integrado por 740 profesionales, está en huelga con paros parciales diarios de tres horas que, según los convocantes, han provocado la suspensión de 65.000 exámenes, aunque la DGT lo cifra en 37.000 y asegura que la práctica totalidad de las pruebas ya se han realizado.

A falta de datos definitivos, ayer en el centro de Móstoles (Madrid), el principal de España y con una plantilla de 70 profesionales, el seguimiento fue del 50% según los examinadores y del 25% según la DGT.

Los examinadores, como dijo a los periodistas el coordinador nacional de Tráfico del CSI-F, Manuel Santiago, van a mantener los paros parciales hasta al menos el lunes, cuando han sido citados por la DGT para seguir negociando. Santiago valoró que se "mueva ficha" y confió en que el lunes sea la negociación definitiva para poder desconvocar los paros, porque se está "más cerca del acuerdo que lejos".

El dirigente sindical recibió como un "avance sustancial" la propuesta de la DGT para retrasar la comunicación al alumno del resultado de su examen y que se entregue al profesor de la autoescuela, pero los sindicatos convocantes quieren que se defina aún más.

"Siempre hemos pedido que fuera al final de la jornada o al día siguiente, pero si tenemos que dar un resultado en mitad de un descampado solo cambiamos de actores, pero el peligro potencial (de agresiones) sigue ahí", señaló Santiago.

El colectivo pide también que se rebaje la carga de trabajo y se reduzca de 13 a 12 la media de exámenes diarios que realizan, que se potencien las plantillas y que se ajusten las retribuciones que perciben por la penosidad de su puesto.

Sobre el primer aspecto, el secretario general de la DGT, Cristóbal Cremades, recordó que Tráfico quiere adoptar medidas organizativas para que la carga de trabajo disminuya progresivamente y, por ejemplo, se pueda rebajar el número de exámenes en épocas de baja demanda.

No obstante, precisó que los 13 que realizan se ajustan a la jornada laboral y bajarlo a 12 supondría dejar de hacer al año unos 150.000 exámenes, lo que sería muy difícil de explicar a los ciudadanos.

"Toda la disposición"

La directora general de la Dirección General de Tráfico (DGT), María Seguí, afirmó ayer que tiene "toda la disposición del mundo" para resolver "las cuestiones que se puedan mejorar desde el trabajo y desde las mesas de negociación". De esta manera se refirió Seguí a la huelga convocada por los examinadores del carné de conducir, que solicitan mejoras salariales y laborales, así como mayor seguridad ante las agresiones que sufren por parte de algunos alumnos. Seguí señaló que la DGT trata de "proveer un servicio público de buena calidad". "La DGT tiene toda la disposición del mundo para resolver todas las cuestiones, pero desde el trabajo y las mesas de negociación", concluyó.

Reforzar las plantillas

El secretario general de la DGT, Carlos Cremades, expresó, por su parte, la voluntad del organismo de reforzar las plantillas. Según fuentes de la DGT, el colectivo ha sido uno de los más beneficiados durante la crisis en las tasas de reposición de las plantillas en la administración, ya que han podido reponerse 100 puestos. Cremades dejó claro que los examinadores seguirán siendo un servicio público. Tráfico ya envió en julio a Hacienda una propuesta de aumento retributivo para 1.933 examinadores y otros funcionarios, y se encuentra a la espera de la respuesta.

La DGT probará un dron para el control del tráfico

La Dirección General de Tráfico y la firma española Sistemas y Montajes Industriales (Sistem) trabajan en el desarrollo de un prototipo de un avión tripulado a distancia (dron) para el control del tráfico, que podría ser probado a mediados de 2016.

Según explica a Efe el director de Ingeniería de la empresa, Alberto de Laorden, este prototipo estará equipado con una cámara y podría ser probado en una carretera convencional.

Según Laorden, hasta ahora la utilización de estos aparatos se limitaba al ámbito militar, si bien en los últimos meses se emplean también en determinadas tareas civiles. "La legislación actual no prevé el uso de drones en seguridad vial, porque, de momento, el piloto ha de tener el aparato a la vista, con lo que no es posible enviarlo a cientos de kilómetros, donde la DGT no cuente con cámaras o sensores", detalla. Estos aparatos pueden transportar hasta 8 kilos, es decir, que pueden ser equipados con una cámara estabilizada que envíe señal de vídeo en tiempo real hasta 80 kilómetros de distancia, aunque puede ser "mucha más si se utilizaran los repetidores de la DGT", y cuentan con una capacidad de vuelo de hasta 8 horas.