La intervención rápida se convierte en un elemento clave de cara a reducir el impacto y el riesgo de secuelas ante un ictus, enfermedad cuyo día mundial se celebra este jueves 29 de octubre.

La médico intensivista de Hospital Parque María Iglesias señala que las primeras seis horas desde que tiene lugar este accidente cerebrovascular son de vital importancia a la hora de poder evitar una patología con una prevalencia de 200 casos por cada 100.000 habitantes, con una mayor frecuencia en el tramo de edad comprendido entre los 50 y los 70 años, y que se ha convertido en la segunda causa de muerte en España.

La hipertensión, la diabetes, los elevados índices de colesterol, las enfermedades cardiacas, el consumo de tabaco, alcohol o drogas y una vida sedentaria se convierten en los principales factores de riesgo de la aparición de ictus.