La obesidad es el quinto factor de riesgo de muerte en el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año fallecen 2,8 millones de personas adultas por esta causa. La incidencia de esta enfermedad en las Islas Canarias es significativa, pues según el estudio ENPE 2014-15 sobre la prevalencia de la obesidad, el 20 por ciento de los canarios la padece, situando al Archipiélago como la cuarta comunidad autónoma con mayor índice de obesidad.

La obesidad es una enfermedad crónica, de tendencia epidémica y creciente. Esta enfermedad se caracteriza por un aumento de la masa grasa y se define obesa a aquella persona que tiene un Índice de Masa Corporal (IMC) igual o superior a 30 kg/m2 o un perímetro de cintura igual o superior a 102 cm en varones y 88 cm en mujeres. Cuanto mayor sea el índice de masa corporal, tanto más grave será la obesidad.

El Hospital San Juan de Dios de Tenerife dispone de un equipo multidisciplinar de profesionales que tiene como objetivo realizar un abordaje integral de las personas con obesidad, respondiendo a la demanda generada por su enorme incidencia a nivel regional y que se suma con entusiasmo a la estrategia a nivel mundial para combatir de esta epidemia.

Un IMC elevado incrementa el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como las cardiopatías y los accidentes cerebrovasculares, así como de padecer diabetes, hipertensión arterial, apneas del sueño o la hipercolesterolemia, los trastornos del aparato locomotor y algunos cánceres, así como trastornos de tipo psicológico.

Isabel Mascareño, endocrinóloga del Hospital San Juan de Dios asegura que la causa fundamental de la obesidad es un desequilibrio energético entre calorías consumidas y gastadas y que la única forma de romper este desequilibrio es orientar el tratamiento de la obesidad hacia la consecución de un estilo de vida saludable, mediante la alimentación y el ejercicio físico prescritos por profesionales especializados.