Tres de los mayores expertos académicos en España en especies invasoras han recomendado hoy a los diputados que integran la Comisión de Medio Ambiente del Congreso que no reformen la actual normativa para erradicarlas, al considerar que crearían "inseguridad jurídica" y "graves daños ambientales y económicos".

Ante el proyecto de reforma de Ley de Biodiversidad que impulsa el PP para hacer excepciones con determinadas especies invasoras, la Comisión de Medio Ambiente ha escuchado hoy la visión al respecto de dos catedráticos de zoología, Benigno Elvira (Universidad Complutense) y Carlos Fernández (Universidad de Córdoba), y del profesor de Derecho de la Universidad de Extremadura, Pedro Brufao.

La reforma que plantea el grupo parlamentario del PP viene motivada por una sentencia del Tribunal Supremo que, basándose en el criterio de los científicos, dictaminó en 2016 que las especies excluidas en el catálogo de invasoras que el Gobierno elaboró en 2013 debían volver al mismo.

Algunas de estas especies a las que afectaba la sentencia, como la trucha arco iris, el lucio, la carpa, o el cangrejo americano, son objeto de actividad económica por lo que el PP propone una reforma de la citada ley para hacer excepciones con esas especies.

En su intervención, el catedrático de la Complutense ha desmontado los argumentos ofrecidos por el PP para reformar la norma, entre ellos el hecho de que una especie lleve mucho tiempo invadiendo un hábitat no suponga ya ningún daño para el mismo, alegando que "la antigüedad de una especie en un medio no minimiza el daño que causa" al mismo.

Elvira ha invalidado argumentos dados para la reforma con especies concretas como que la suelta de ejemplares de la invasora trucha arco iris en tramos concretos podría disminuir la presión sobre la trucha autóctona.

El catedrático ha sostenido que no hay garantías de que eso vaya a ser así, como tampoco las hay de que ninguno de los ejemplares que se suelten tenga capacidad de reproductiva, como plantea el PP.

Su homólogo en la Universidad de Córdoba, Carlos Fernández -uno de los científicos consultados por el Supremo- ha ofrecido argumentos similares, e incidido en que la Ley de Biodiversidad ya contempla la posibilidad de dar un tratamiento individualizado al control de cada especie invasora.

Fernández ha hablado de su experiencia con una de las especies más controvertidas, el cangrejo rojo americano en Andalucía, y ha puesto como ejemplo el plan de erradicación que lleva a cabo la Junta mediante el cual se ha convertido a los pescadores en "controladores" de esta especie invasora.

Para explicar el daño que hacen las invasoras, Fernández ha puesto el ejemplo de la pérdida de biodiversidad sufrida en la laguna de Zóñar (Córdoba), que tras una suelta de carpas invasoras dejó de ser un importante refugio para aves migratorias.

Retirar las carpas de esa laguna costó al erario público 600.000 euros.

Por su parte, Brufao ha subrayado "que no hace falta una reforma legal porque el régimen jurídico existente es claro, ajustado al derecho europeo y respaldado por la evidencia científica", por lo que modificarlo supondría "crear inseguridad".

"La ley ya contempla que con determinadas especies se puedan realizar actuaciones particulares", ha incidido el profesor de Derecho, quien ha calificado de "argumento falaz y demagógico" que el PP relacione el despoblamiento rural con el control de las especies invasoras.

Brufao también ha recordado que el control de especies exóticas no impide que estas se pesquen, sino que evita que puedan introducirse en los ríos o ser devueltas a los mismos una vez pescadas.