Durante el paso de primaria a secundaria, el 13 por ciento de las niñas abandonan la actividad física que realizaban en el colegio, según muestran los datos del XI Informe Faros del Hospital San Joan de Déu, Barcelona, y avalado por el Consejo Superior de Deportes.

En este sentido, el dato es superior respecto a los chicos de esta edad, entre los 12 y 13 años, que se encuentra en un 5,9 por ciento. Sin embargo, el abandono entre niñas va aumentado hasta un 70 por ciento cuando llegan a la mayoría de edad, según ha declarado la especialista de medicina de la educación física y el deporte, de la unidad de Medicina del hospital, Eva Ferrer, durante la rueda de prensa de este lunes para presentar el informe.

A su vez, ha recordado que a los 13 y 17 años solo el 14 por ciento de chicas realiza la actividad física recomendada por la Organización Mundial de la Salud, es decir, un total de 60 minutos al día de deporte con intensidad moderada o vigorosa aeróbica.

Respecto a la primaria, a los seis años el porcentaje de niños que hace una práctica deportiva es un 6,9 por ciento superior al de las niñas, según se desprende del informe.

Entre las causas por las que las niñas abandonan el deporte se encuentra las diferencias socioculturales, según se demuestra en el informe. En concreto, desde el hospital han apuntado que "la sociedad proyecta una serie de expectativas y creencias diferentes y desiguales hacia niños y niñas. En la actualidad, las actividades lúdicas y deportivas tienen una clara marca de género. Cada actividad socializa a niños y niñas en determinados tipos de valores, generalmente unos tipo más competitivo, y otros más de tipo expresivo y cooperativo".

A su vez, han expresado que otra de las causas principales podría ser "la falta de referentes femeninos", pues esto supone "un obstáculo a la hora de sentir interés por ciertos deportes".

Los autores del informe han incidido en la necesidad de cambiar esta tendencia desde la escuela - en el ámbito de la educación física y en el tiempo de recreo- desde la familia y la comunidad para que las niñas puedan tener las mismas oportunidades.

También, han considerado necesario intervenir de forma "consciente y explícita en al ruptura de los estereotipos y prejuicios de género, poner en evidencia las situaciones de discriminación y desigualdad, y favorecer la formación integral de niñas y niños en toda su diversidad y riqueza".

Así como han creído que es clave incidir en la infancia, pues está demostrado que la población que practica actividades deportivas estructuradas durante la infancia realiza más actividad física al llegar a la edad adulta, ya que está habituada a destinar tiempo".

Según se ha apuntado el presidente del Consejo Superior de Deportes, José Ramón Lete Lasa, el deporte ayuda a reducir el riesgo de enfermedades como las cardiovasculares, la diabetes, ciertos tipos de cáncer, hipertensión, obesidad, depresión, osteoporosis, e incluso, muerte prematura.

Al igual que, las especialistas del informe han señalado que ni el ciclo menstrual ni el embarazo deben suponer dificultades para realizar actividad física, solo se debe adaptar a cada situación. MOTIVAR A LAS NIÑAS PARA SER ACTIVAS, CLAVE PARA EVITAR EL ABANDONO DEPORTIVO

Los autores del informe Faros han realizado un decálogo con consejos para evitar el abandono deportivo en niñas y adolescentes, donde se destaca la motivación para ser activa, "valorar el esfuerzo y que se supere en retos para impulsar su crecimiento personal".

A esto se le añade que tanto las niñas como las adolescentes necesitan una hora diaria de actividad física, principalmente aeróbica. Tres días a la semana han recomendando que se incluya algunas actividades vigorosas, especialmente las que fortalezcan los músculos y huesos.

Al igual que moverse en familia, y escoger una práctica deportiva bajo dirección de un profesional cualificado en espacios deportivos seguros. A su vez, han manifestado que antes de los ocho años se debe iniciar en actividades variadas, con el objetivo de desarrollar actividades motrices y básicas.

Se le suma los hábitos saludables, potenciar los valores como el trabajo en equipo, orientar a la niña y acompañarla en su actividad física; promover que el deporte sea diversión, y recordar que "las niñas tengan igual de oportunidades depende de todos".