El número 42206 ha resultado agraciado con el primer cuarto premio del Sorteo Extraordinario de Lotería de Navidad 2018, dotado con 200.000 euros o, lo que es lo mismo, 20.000 euros por décimo. Fue vendido íntegramente por la Administración Número 2 de Llodio (Álava), cuyo propietario, Carlos Resa, se mostró "muy emocionado" por haber repartido 34 millones de euros en premios.

Las 170 series fueron adquiridas tanto en la propia administración como en un bar y en una pastelería del pueblo.

El segundo cuarto, el 67774, estuvo repartido por media España. Molina de Aragón (Guadalajara); Mondragón (Guipúzcoa); Robres (Huesca); Lomo Cementerio-Telde, San Bartolomé y Pájara (Las Palmas); Gijón y Cangas de Narcea (Asturias); Arroyo de la Luz (Cáceres); Viernoles y Burriana (Castellón); Ceuta; Ciudad Real; Castelló d''Empúries y Sarriá de Ter (Girona)...

Como curiosidad, destacar que la Administración de Lotería 5 de Ripollet devolvió las quince series del 67774. No vendió ningún décimo. No era atractivo para el cliente. Sumaba tres millones de euros.

Los quintos premios se encargaron de "pegar" a los espectadores a la pantalla de sus televisores desde bien temprano. El número 47862 fue el primero en salir a escena. Eran apenas las 9:20 horas en Madrid (una hora menos en Canarias) y se "escondía" en el segundo alambre de la primera tabla. Sin tiempo para digerirlo, cuando todavía muchos jugadores que aún miraban sus boletos por si coincidía con el agraciado, se cantaba el segundo quinto, el número 07568. No era el Gordo pero mantenía atenta a toda la Sala a los movimientos de los Niños de San Ildefonso.

El 68402 y el 29031 también se "presentaron" en un espacio corto de tiempo. Uno detrás del otro. Sobre las diez de la mañana. En la segunda tabla del Sorteo. A partir de ese momento, el ritmo de los premios mayores o, para ser más exactos, los pequeños de los mayores, se detuvo más de una hora. La Lotería Nacional, que tiene esas peculiaridades que la hacen más grande, parecía que reservaba los quintos para cantarlos de dos en dos. Eso es al menos lo que volvió a ocurrir sobre las 11.11, primero con el 63025 y casi de forma consecutiva con el "curioso" capicúa 20202.

Los dos últimos quintos de la Lotería de Navidad fueron el 18596 y el 02308.

Con ocho premios de 6.000 euros al décimo, un elevado número de poblaciones se ven beneficiadas. Jumilla (Murcia), Toro (Zamora), Ciudad Real, Elche de la Sierra (Albacete), Burgos, Madrid, Barcelona, Abegondo (Coruña), Fuengirola (Málaga), Santa Margarita (Cádiz), Val do Dubra (Coruña), Figueres (Girona), Talamanca del Jarama (Madrid), Santa Cruz de Tenerife...

Hay que tener en cuenta que este año, con el incremento del umbral del gravamen sobre la lotería a 10.000 euros, los agraciados con el quintos premio están exentos de pagar impuestos.

El incremento de los premios por máquina

La importancia cada vez mayor de los números adquiridos por máquina tiene su reflejo especialmente en los premios más pequeños de los grandes. Destacar por ejemplo que el 02308, premiado con 6.000 euros por décimo, se distribuyó no solo de la forma tradicional en una decena de administraciones, sino que por terminal fue vendido en 148 administraciones de todo el territorio nacional. Lo mismo ocurrió con otro quinto, el 29031, que en su caso fue vendido en terminal en otras 76 administraciones. Un número notable de compradores son conscientes que es el uso de esta "nueva" tecnología resta emoción, si cabe, en el entorno de las administraciones cuando se conocen los premios, pero a la vez permite acceder a números concretos que de otra forma sería una auténtica odisea.