El criminólogo Félix Ríos solicitará en breve a la titular del Juzgado de Instrucción Numero Uno de Santa Cruz de Tenerife la posibilidad de practicar nuevas pruebas sobre el caso del infanticidio de una niña de 11 años y un niño de cinco, que fueron asesinados supuestamente por la madre de ambos y su pareja y padre del pequeño en una vivienda del barrio capitalino de Vistabella.

Más de dos meses después de que la sociedad canaria se estremeciera por el descubrimiento del macabro suceso, la asociación de lucha contra el crimen Laxhmi, que dirige el citado Ríos y con la colaboración de la abogada Yaremi Padrón, está personada en el caso y trata de profundizar en el conocimiento de nuevos detalles sobre el asunto. Una de las pruebas solicitadas consiste en un estudio grafológico de la carta encontrada en la casa por agentes de la Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía. Dicho documento, formado por cinco folios, estaba roto en varios trozos y tuvo que ser "rehecho" por los citados funcionarios. El objetivo de Ríos es determinar quién escribió la carta, en qué momento lo hizo y cuál era el estado "psicopatológico" de su autor o autores cuando se redactó.

Según el criminólogo, esa información ayudará a señalar la intencionalidad del crimen por parte de ambas personas imputadas y es la prueba más inmediata al crimen "que nos hablaría de la personalidad de los sujetos en ese momento". El colectivo también pedirá estudiar el cable para ver si, efectivamente, el padre de Joseba se intentó ahorcar. La asociación dirigida por Ríos también solicita varias gestiones para confirmar si hubo malos tratos sobre la niña Tindaya.

Los policías hallaron en uno de los ordenadores de la pareja implicada fotos con imágenes relacionadas con la santería, símbolos satánicos o textos descriptivos de ceremonias de iniciación a prácticas esotéricas.