El juzgado que lleva el caso por el asesinato de las jóvenes de Cuenca Laura del Hoyo y Marina Okarynska ha iniciado ya los trámites oportunos con las autoridades competentes para la entrega a España del sospechoso del crimen, Sergio Morate, ingresado mientras tanto en una cárcel de Rumanía.

Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha han indicado que el juzgado que lleva las diligencias previas inició ayer los trámites oportunos para la extradición, de los que no han trascendido más detalles al seguir el caso bajo secreto de sumario.

El secreto sumarial fue decretado el 10 de agosto, después que los padres de Marina y Laura denunciaran la desaparición de las jóvenes cuatro días antes, el 6 de agosto, y un día después lo hicieran los padres del presunto asesino.

Sergio Morate, exnovio de Marina Okarynska, fue detenido el pasado jueves en Lugoj, en la provincia de Timisoara (Rumanía), en cumplimiento de una orden europea de detención en la que la policía nacional y rumana habían trabajado conjuntamente.

Aunque el Tribunal de Apelación de Timisoara ha fijado un período de detención provisional de 15 días, se da por seguro que este plazo no se agotará, dado que el deseo del Gobierno español es que Sergio Morate sea extraditado cuanto antes.

Para ello, el juzgado de Cuenca inició ayer los trámites de extradición, en la misma jornada en la que fueron enterradas las dos jóvenes presuntamente asesinadas a manos de Morate.

Hoy se ha conocido que el Ayuntamiento de Cuenca dedicará un espacio público de la ciudad en homenaje a Laura y Marina, que servirá además de recuerdo a todas las víctimas de la violencia machista, según ha adelantado en su cuenta de Twitter el consistorio conquense.

Desde Lugoj, Istvan Horvath, un ciudadano rumano acusado de ayudar a Sergio Morate a ocultarse en Rumanía, ha asegurado hoy que el sospechoso le contó que había matado a su exnovia en España, pero que él no le creyó.

"Al día siguiente (de llegar a Rumanía) me contó que había matado a Marina. No le creí, le dije que intentaba impresionarme", ha dicho Horvath para justificar por qué no advirtió de ello a la policía.

Horvath, que conoció a Mprate en la cárcel en España, había alquilado el apartamento donde ambos fueron detenidos el jueves.

El propietario del edificio, Flavius Luca, ha explicado que Sergio Morate pretendía alquilar un apartamento en Lugoj "para un mes, dos meses o un año".

"Le dije que no disponía de un estudio, pero que le ayudaría", ha aclarado.