Policías locales de Granadilla detuvieron en la madrugada de ayer a la pareja de María Victoria Zanardi Maffiotte, de 44 años, la mujer que en la mañana del lunes apareció asesinada en una vivienda del camino La Rúa, en La Laguna. El individuo, José Ivan D.E., de 36 años, deambulaba muy alterado por las cercanías del hotel Playa Sur, en la zona de Los Balos, en El Médano. De forma leve, trató de lesionarse en cara y manos. Mientras era calmado por personal sanitario, el ahora apresado, natural de La Laguna, relató lo que hizo.

El personal de la ambulancia llamó a la Policía Local de Granadilla, que interrogó al ahora acusado y este confirmó que cometió el crimen. Inicialmente, los sanitarios comprobaron que estaba muy nervioso y decía cosas inconexas, sin sentido. Tras calmarlo, dijo a los técnicos de la ambulancia y a los policías que la había matado y añadió "La Laguna". Rápidamente, los policías relacionaron sus palabras con el trágico suceso conocido apenas 15 horas antes. Los agentes activaron a una patrulla de la Guardia Civil, que estaba en otro servicio y no pudo acudir inicialmente a esa intervención.

Los policías locales de Granadilla entregaron al arrestado al Equipo Territorial de Policía Judicial de la Guardia Civil de Granadilla, que posteriormente custodió la ambulancia que llevó a José Iván al hospital de La Candelaria, donde recibió el alta horas después. El apresado mostró una actitud colaboradora y aparentaba arrepentido.

El apresado propinó golpes a la víctima con un objeto contundente. Uno de ellos le afectó a la zona craneal, a la altura de un ojo. Esa fue la lesión que observaron los bomberos cuando entraron a apagar el fuego. María Victoria residía en la vivienda número 54 del camino La Rúa, un edificio que fue propiedad de su padre. Los investigadores de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de La Laguna tomaron declaración ayer al arrestado. El cadáver apareció en la planta baja de la vivienda, cerca de un sofá en llamas.

Los bomberos encontraron a la víctima en una habitación con abundante basura. Cuando entraron, los bomberos observaron que alguien tapó a la víctima con una toalla y roció el cuerpo y el suelo con material inflamable. Además, junto a la fallecida había dos bombonas de butano para que explotaran cuando el fuego se extendiera.