La Policía argentina detuvo hoy a cuatro adolescentes en la provincia de Buenos Aires acusados de realizar llamadas anónimas con avisos falsos de bombas en diferentes escuelas, informaron fuentes oficiales.

Los detenidos son tres chicas de 12, 13 y 18 años, dos de ellas hermanas, y un joven de 16, según fuentes del ministerio de Seguridad de la provincia.

En un allanamiento, las fuerzas de seguridad provinciales se incautaron de nueve teléfonos móviles, entre los que localizaron el que el joven usó para realizar las amenazas.

Los detenidos cursaban o habían cursado estudios en los centros afectados, que están ubicados en diferentes localidades del cinturón urbano de Buenos Aires.

Las llamadas anónimas para avisar sobre la presencia de presuntas bombas en los centros educativos está causando gran controversia en Argentina, país que se encuentra en un clima de tensión política por las elecciones legislativas fijadas para el próximo 22 de octubre.

Según las autoridades, en el último mes se han contabilizado cerca de 3.000 llamadas anónimas con avisos de bomba falsos.

El ministro de Seguridad provincial, Gustavo Ferrari, dijo en declaraciones al canal local TN de que este comportamiento es punible y recalcó que cada movilización tras una llamada cuesta al Gobierno unos 100.000 pesos (cerca de 6.000 dólares).

Por ese motivo, añadió que el Gobierno bonaerense considera convertirlo en un "delito civil" que obligue a los causantes a pagar el gasto que conlleva la evacuación de los centros.

Por su parte, alumnos y profesores denunciaron en redes sociales y algunos medios locales que las clases que están perdiendo no son recuperables y protestaron contra las llamadas, que continúan sucediéndose a diario.