La Policía Nacional consiguió liberar en 2017 a 52 víctimas de la trata de seres humanos con fines de explotación sexual gracias a las 1.645 comunicaciones alertando de estas situaciones que fueron recibidas a través de los canales de comunicación que se habilitaron para ello en 2013.

Fruto de la información facilitada se desplegaron 11 operaciones policiales en las que fueron detenidas 58 personas y fueron liberadas 52 víctimas, cinco de ellas menores de edad.

De las 1.645 comunicaciones recibidas, 881 fueron al teléfono habilitado (900105090) y 764 al correo electrónico trata@policia.es, canales que son gestionados por agentes especializados y fueron activados para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia anónima y confidencial de este tipo de delitos.

Gracias a una comunicación a este número de teléfono, los agentes liberaron en Madrid a una menor de edad que fue captada a través de las redes sociales con la intención de ser explotada sexualmente.

La llamada al servicio de atención a las víctimas de la trata fue realizada por un familiar de la menor, de 16 años, que alertaba de su desaparición tras escapar la semana anterior del domicilio familiar en Madrid donde vivía con su madre y su hermana.

Según los datos que aportó, la menor podría hallarse en casa de su novio o amigo del que sabía que era de nacionalidad rumana y al que había conocido a través de las redes sociales.

Los investigadores constataron la relación con ese chico de 25 años de edad y que la menor estaba siendo forzada o coaccionada a abandonar el domicilio familiar en periodos de 4 o 5 días por semana, tiempo en el que la madre de la menor desconocía su paradero y circunstancias de vida.

A su regreso tan solo decía que había estado con su novio en la madrileña localidad de Coslada sin dar ningún tipo de información sin autorización de su novio.

En menos de 24 horas, los agentes localizaron y liberaron a la chica y detuvieron al joven como presunto autor de un delito contra la trata de seres humanos en grado de tentativa e inducción al abandono del domicilio familiar.

La joven fue captada a través de las redes sociales en Internet mediante el método conocido como ''lover boy'' y el captador simuló una relación sentimental para luego aludir a la necesidad de obtener dinero para ambos y exigir a la menor que ejerciera la prostitución.