La Fiscalía ha considerado que están "suficientemente acreditados" los casi 2.000 euros de daño económico que ocasionó Juana Rivas a su expareja, el italiano Francesco Arcuri, que se desplazó hasta España el verano pasado ante la negativa de esta vecina de Granada a devolverle a sus hijos.

El Juzgado de Primera Instancia 3 de Granada, encargado de asuntos de familia, ha celebrado hoy la vista para fijar los posibles daños y perjuicios que causó Rivas a su expareja y padre de sus hijos, después de que ella rechazara entregarle a los menores.

La Fiscalía y la representación legal de Arcuri han cifrado en 1.912,5 euros el daño económico que la expareja de Rivas tuvo que afrontar en su desplazamiento desde Italia, una cantidad constituida fundamentalmente por el gasto en avión, alojamiento y tren, y que incluye los viajes del demandante y de sus dos hijos.

El Ministerio Público ha considerado que está "suficientemente acreditado" la estancia de Arcuri en España y los motivos, ha considerado que se trata de un gasto "indemnizable" y ha recalcado que Rivas tiene que afrontar los gastos.