La Guardia Civil ha desmantelado un entramado criminal que habría evadido más de 40 millones de euros con la introducción y venta de mercancía procedente de China en varios países de la UE, entre ellos España, sin pagar los impuestos debidos, para retornar todos los beneficios al país asiático.

En colaboración con la Agencia Tributaria, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en España y las policías de Rumanía y Portugal han asestado un nuevo golpe a este tipo de mafias chinas dedicadas a la introducción y comercialización en territorio europeo de artículos asiáticos de forma fraudulenta.

Trece personas han sido detenidas en España, concretamente en Valencia y Madrid, a las que se les imputan los delitos de blanqueo de capitales, contra la hacienda pública, pertenencia en organización criminal y un delito contra el mercado y los consumidores.

Además, 600 entidades han sido investigadas, imputadas 50 personas jurídicas y otras tantas físicas.

La organización, en palabras del jefe del grupo de delincuencia Económica de la UCO, Antonio Balas, estaba implantada en toda la UE y empleaban diferentes países bien para introducir la mercancía de bajo valor (juguetes) o falsificada (fundamentalmente calzado y ropa), bien para distribuyen o bien para evadir las ganancias hacia otros países por vía marítima, tren o avión pero con destino final a China.