Cinco integrantes de una familia franco-española, una de ellas un niño de 2 años, murieron ayer en lo que parece ser un caso de violencia machista que derivó en el incendio de su vivienda, situada en el centro de la localidad de Pau, en el suroeste de Francia. Las primeras pistas indican que el marido -de nacionalidad francesa y que, según un conocido, había sido denunciado por su mujer, española, por violencia de género- habría sido el autor de los hechos, tras los cuales se suicidó.

Los vecinos escucharon una pelea en el hogar a las 05:00 hora local (03:00 GMT) y uno de ellos llamó a los bomberos hora y media después, alertado por la sangre y el humo que salía de la puerta principal de la casa. El fuego se desencadenó en el primer piso de un edificio de cuatro plantas y, aunque no se propagó al resto, obligó a evacuar a los otros 25 habitantes, que fueron albergados provisionalmente en dependencias municipales.

Al llegar al lugar, los bomberos se encontraron en el piso siniestrado con cinco cuerpos: los del matrimonio y su hijo de dos años, y los de los padres de la mujer, que habían llegado desde España para visitarles, confirmaron fuentes municipales de Pau.

Cuatro de los cinco fallecidos son originarios de la localidad sevillana de Pilas. Concretamente, se trata de J.M.R., de 65 años, y su pareja sentimental, así como de M.M.P. de 36 años y el hijo de ésta, de dos años.