La Guardia Civil ha detenido a un total de cinco personas, tres en la isla de Gran Canaria y dos en la provincia de Cádiz, como presuntos autores de diferentes hechos delictivos relacionados con una trama de documentos falsificados utilizados para la venta de cobre perteneciente a una empresa de instalaciones y reparaciones eléctrica que falseaban los escritos para vender el metal y quedarse con el beneficio obtenido.

Según informa la Benemérita, el Equipo Roca de la Comandancia de Las Palmas inició una investigación el pasado mes de julio y durante la misma se ha podido recuperar 1.111 kilogramos de cableado de cobre.

De esta manera, los agentes, en funciones relativas al control de material de cobre, realizaron a mitad de año varias inspecciones de ventas de dicho material realizadas en las distintas recuperadoras de Gran Canaria.

Así, identificaron tres ventas aparentemente irregulares de diferente tipo de material realizadas por dos personas.

TRES PRIMEROS INVESTIGADOS EN CÁDIZ Y TELDE

Tras las indagaciones, los agentes encontraron indicios suficientes del uso de autorizaciones manipuladas de venta por parte de una persona de iniciales P.G.L., 53 años, vecino de Cádiz y sin antecedentes, donde autorizaba a un familiar suyo --F.G.L.M., de 33 años y vecino de la misma provincia-- y a un conocido y vecino de Telde y de iniciales J.F.R.P., para que se utilizaran sus datos para la venta del material.

Por su parte, para proceder a la investigación de los dos primeros el Equipo Roca solicitó la colaboración de la Comandancia de Cádiz, ya que ambos residen en dicha provincia.

Con las pesquisas policiales se corroboró que dicho material de cableado de cobre provenían de subestaciones de la isla de Tenerife, las cuales están siendo reformadas, y que la persona que entregaba el material era trabajador de una empresa de instalaciones eléctricas.

De esta manera, el mismo se quedaba con el dinero procedente de dichas ventas a partir de documentos manipulados, incurriendo por ello en un delito de falsedad documental.

Además, durante la investigación el Equipo Roca relacionó con la trama por la venta de los 1.111 Kilogramos de material de cobre a dos trabajadores de una empresa de reciclajes de Gran Canaria, concretamente el gerente y un empleado, residentes en el municipio de Las Palmas de Gran Canaria y sin antecedentes policiales, ya que estos presuntamente rellenaron unos albaranes sin que los interesados se encontraran presentes para que P.G.L. cobrase supuestamente por la venta del cobre.