Un bebé de casi seis meses falleció a mediodía de ayer en un centro infantil de Santa Cruz de Tenerife por circunstancias que investigan agentes de la Policía Nacional.

Los hechos ocurrieron en una empresa situada en la calle Castro, a la altura de la zona de las Ramblas de Santa Cruz.

Desde dichas instalaciones alertaron a los servicios de seguridad y emergencia, ya que el menor, nacido el 31 de julio pasado, no respondía a estímulos.

El primero en llegar hasta el mencionado espacio fue un motorista de la Policía Local de la capital tinerfeña. Al comprobar que el pequeño se encontraba en parada cardiorrespiratoria, el citado agente empezó a efectuarle maniobras de reanimación básicas.

Además, dicho funcionario del cuerpo de seguridad municipal alertó a sus compañeros para que acudieran a la zona y se estableciera un dispositivo eficaz ante una posible evacuación a algún hospital.

Posteriormente, hasta el citado enclave se desplazó personal sanitario de una ambulancia medicalizada del Servicio de Urgencias Canario (SUC).

Esta dotación continuó con las maniobras de reanimación avanzadas, pero estas no tuvieron resultado positivo y el médico solo pudo certificar el fallecimiento.

A partir de ese momento, el asunto ha quedado judicializado.

El cadáver fue trasladado hasta el Instituto de Medicina Legal de Santa Cruz de Tenerife, donde está previsto que hoy se le practique la autopsia para determinar las causas reales de la muerte. Como es preceptivo y habitual en estos casos, agentes de la Brigada de Policía Judicial recabarán el testimonio de personal del centro infantil para tratar de saber qué circunstancias rodearon la muerte. Fuentes autorizadas de la Policía Local y de la Policía Nacional se limitaron a confirmar la información.