La Guardia Civil encontró semienterrados los cuerpos sin vida de los dos niños desaparecidos en la localidad de Godella (Valencia) que fueron vistos por última vez este pasado miércoles, según informaron a Europa Press fuentes de la investigación. El hallazgo se produjo en la tarde de ayer.

Después de varias horas de interrogatorio con versiones contradictorias de los padres, la madre condujo a los investigadores hasta el lugar donde estaban los cadáveres de la niña de cinco meses y del niño de tres años y medio. Por la tarde, fue detenida.

Según la versión del progenitor, la madre de los dos niños trató de ahogarlos el pasado miércoles por la noche después de que la pareja tuviera una fuerte discusión. El delegado de Gobierno, Juan Carlos Fulgencio, explicó previamente que se habían contradecido e incurrido en incoherencias y que, en un primer momento, no se mostraban colaboradores.

Las citadas fuentes subrayan que la familia residía en una casa ocupada y que los servicios sociales habían abierto un expediente debido a los problemas mentales de los progenitores y la desatención hacia los menores que podía conllevar la retirada de la custodia.

Los niños desaparecidos en Godella fueron vistos por última vez el pasado miércoles por una amiga de la familia que les llevó comida y su búsqueda estaba activada en los alrededores de la vivienda. Los padres han declarado en el puesto de la Guardia Civil de Moncada.

El operativo se inició al recibir en la mañana de ayer al menos dos llamadas que alertaban de que se habían oído gritos en la casa que okupaba esta pareja en el término municipal de Godella, próximo a Rocafort. La Guardia Civil y la Policía Local comprobaron que el padre estaba en la casa, pero no la madre. Algunos testimonios indicaban que había salido corriendo desnuda, hasta que fue hallada a mediodía escondida en un bidón, con arañazos "propios de haber corrido, sin más". Además, ante las preguntas sobre los menores, las respuestas del padre habrían sido "incoherentes".

Cuestionado sobre si se encontró sangre, el delegado señaló que se trataba de "un pequeño rastro de sangre esporádico que puede ser de un corte cualquiera", si bien remarcó que no correspondería a "una agresión grave y mortal y que la investigación descarta que pueda ser debido a un hecho delictivo". También precisó que no se localizó ningún arma.

Aunque estaba previsto que continuara hasta que las condiciones de luz lo permitiesen e, incluso, que se reanudara hoy, el dispositivo de búsqueda, con 110 efectivos, con participación de Guardia Civil, Policía Nacional y Local, voluntarios de Protección Civil y bomberos con perros de búsqueda especializados en hallar personas vivas y fallecidas, quedó parcialmente desactivado ayer.

La prioridad era localizar a los niños

En las horas previas a la localización de los cuerpos de los menores, el delegado del Gobierno en la Comunida Valencia hizo hincapié en que la prioridad era encontrar a los niños lo antes posible y tratar que la búsqueda lleve a encontrarlos vivos. Fulgencio comentó que "no hay otra hipótesis, es la única prioridad y solamente interesa obtener un rastro fiable que lleve a los niños, insistió el delegado.