No fue ni será Cabo Blanco, tal y como proyectó en su día el Cabildo. Mientras las administraciones jugaban a diseñar y a especular, San Isidro (Granadilla de Abona) se convertía en la gran ciudad del Sur. Cierto que la crisis y la quiebra del sector de la construcción paralizó su expansión espectacular hace un lustro, pero hoy en día sigue siendo el lugar preferente para el asentamiento poblacional nuevo en la comarca.

San Isidro nació como barrio dormitorio, como el lugar de residencia de quienes acuden al Sur llamado por el empleo en el sector servicios. Pero ese crecimiento urbanístico y demográfico le ha dado entidad propia hasta el punto de que hoy es la localidad con más población del municipio, por encima del casco urbano. Cuenta con los institutos de Enseñanza Secundaria Los Cardones y Magallanes, los centros de Educación Infantil y Primaria Juan García Pérez, La Jurada y Abona, un centro cultural y una Casa de la Cultura, iglesia y la ermita dedicadas a San Isidro Labrador, plazas públicas y parques infantiles, gasolineras, farmacias, una oficina de Correos, hoteles, entidades bancarias, varios centros comerciales, así como bares, restaurantes y otros comercios. Además del centro de salud más importante de la comarca, después de El Mojón (Arona).

Los colectivos empresariales y vecinales de la localidad mantienen las reivindicaciones propias de un espacio en crecimiento y multicultural. La dotación de servicios fundamentales y básicas no está completa, se precisan redes de saneamiento y de alumbrado público en varias zonas, se reclaman actuaciones de incentivo comercial, iniciativas públicas que generen empleo o favorezcan a la privada a la hora de crearlo... "San Isidro es un ejemplo del disparate de la autoconstrucción indiscriminada y del desmesurado crecimiento urbanístico. Esto requiere una mejor ordenación, salvo en alguna zona", resumen los empresarios.

Situación

Atogo, Casablanca, Castro, Chuchurumbache, Montaña de Yaco, San Isidro, Vista Gorda y Vistas de Yaco. Todo eso es San Isidro en casi 29 kilómetros cuadrados que incluyen el monumento natural de Montañas de Ifara y Los Riscos y parte de Los Derriscaderos. Situada a la altura del kilómetro 52 de la autopista del Sur, está próximo al aeropuerto Tenerife Sur y al Polígono Industrial Granadilla, donde se emplaza el puerto. Es la vía de entrada principal al municipio de Granadilla de Abona.

Población

La estadística permite constatar dos fases de expansión demográfica: de 1960 a 1980, que pasó de menos de 500 a 2.700 habitantes, y de ahí hasta hoy, que cuenta con más de 20.000 vecinos, cifra que llegó a superar con creces al inicio de esta década cuando el 41% del censo procedía de Cuba, Colombia, Venezuela, Rumanía, Marruecos, Alemania, Portugal y Reino Unido. En cuanto a los residentes canarios, el 46% procede de Granadilla de Abona; el 42%, de otro municipio de Tenerife y el 12% restante, de otra isla.

Nombre

La zona en la que está emplazada la localidad se denominaba Chuchurumbache, término de procedencia guanche que dio nombre a la hacienda creada en el lugar tras la conquista. Fue a partir del siglo XVII cuando tomó el nombre de San Isidro, debido a la fundación de la ermita por la devoción de los dueños de la hacienda por este santo. Las tierras donde se ubica San Isidro pertenecían a la familia García del Castillo, descendientes de Fernando García del Castillo, capitán de caballería durante la conquista de la Isla. A mediados del siglo XIX la zona la formaban por pequeños caseríos poco desarrollados.

La ermita fue erigida hacia 1675 por Lucas Rodríguez del Castillo y por los hijos de su hermana María García del Castillo, para que los labradores de su hacienda cumplieran sus obligaciones religiosas.

LA RADIOGRAFÍA

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