La Defensora de la Ciudadanía de Candelaria, Elena Peraza, presentó al pleno del viernes la memoria de su oficina durante 2016. Un documento en el que se destaca el descenso significativo en el número de quejas (de las 52 de 2015 a las 38 de 2016) y el mantenimiento del número de intervenciones. Los ciudadanos presentaron el año pasado 38 quejas, 35 de forma directa y tres a través del Diputado del Común.

En 2015 ya se produjo un descenso del 36% en el número de quejas planteadas, en comparación con 2013, cuando se atendieron 82 quejas, de las que 13 llegaron desde el Diputado del Común y una desde el Defensor del Pueblo.

Esta oficina realizó en 2016 un total de 73 intervenciones, a lo que hay que sumar una media de 20-30 consultas semanales presenciales, siete inspecciones oculares y 22 reuniones y mediaciones celebradas con personal o representantes de la Administración pública.

Las principales quejas recogidas en la Oficina de la Defensora del Ciudadano están relacionadas con el retraso en la tramitación de solicitudes al consistorio.

La Defensora del Ciudadano propuso al ayuntamiento impulsar la implantación de la administración electrónica, agilizar la tramitación de los expedientes administrativos, procurando cumplir los plazos legales establecidos y practicar una labor más pedagógica en las relaciones entre la administración y los administrados.