Caciques, cabreros, cochineros, lecheras, panaderas, brujas... Santiago del Teide retornó ayer al inicio del siglo XX de manos de medio centenar de personas caracterizadas con vestimenta propia de la época para protagonizar la que fue la representación número 13 de "Al paso de la cumbre".

Oficialmente, cuentan que "las cumbres de la Isla fueron, en el pasado, el lugar por el que transitaron muchos tinerfeños para intercambiar productos y para realizar el trueque. En la actualidad, se escenifica cómo era este trasiego de gente recuperando el conocido como "Al paso de la cumbre". En esta representación participan vecinos y actores, ataviados con los trajes de la época y con los aperos que usaban entonces".

Uno de los objetivos de esta iniciativa es revalorizar los productos que formaban parte del sistema de intercambio, incidiendo en las relaciones sociales que se establecían como fruto de estas transacciones comerciales.

Santiago del Teide organiza este recuerdo a la forma más ancestral de comercio, el trueque, en colaboración con los ayuntamientos de El Tanque y de Garachico, la Fundación Tenerife Rural, la Asociación Cultural Montañeros de Uzapa, los Talleres de Baile de Santiago del Teide, vecinos de San Juan de la Rambla y la Parranda del Ron de la EMF de Arona.

San Francisco de La Montañeta, en Garachico; San José de Los Llanos, en El Tanque, y la plaza de la iglesia de Santiago del Teide fueron los puntos en los que tuvieron lugar las representaciones de aquellas generaciones de canarios que recorrieron los caminos y veredas del Archipiélago buscando el sustento familiar.

Ayer, esta representación (que no es la única en la comarca Sur ni durante el verano) volvió a trasladar a sus muchos visitantes el esfuerzo que hacían los ancestros para buscar el sustento propio y de la familia o, simplemente, la comida de los animales domésticos. "Al paso de la cumbre" volverá el próximo año.