A las 11:30 del 16 de noviembre de 2005 interpuso la primera denuncia ante la Guardia Civil. Una decena de años después de iniciado el procedimiento judicial por el que Juan Delgado, vecino de Barranco Hondo, pidió el levantamiento de la línea eléctrica de media tensión soterrada en suelo de su propiedad sin su autorización, la situación sigue siendo la misma. El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) dictaminó (15 de marzo de 2010) la retirada de dicha línea, medida que el Tribunal Supremo refrendó el 10 de octubre de 2011.

El 28 de julio de 2016, tras pedir la ejecución de sentencia, el TSJC ordena restablecer la propiedad de Juan Delgado a la situación anterior trasladando el incumplimiento de la sentencia al Ministerio Fiscal por si hubiera un delito de "desobediencia grave". Además, impuso una multa de 500 euros cada 20 días a quien desobedeció la decisión judicial.

El Gobierno de Canarias y la compañía Endesa aparecen en los autos como responsables de esta obra, habiendo señalado el TSJC (6 de noviembre de 2017) el 17 de abril pasado como fecha límite para el levantamiento de la línea eléctrica soterrada. El 9 de marzo de este año fue la Viceconsejería de Industria la que ordenó a su Dirección General de Industria proceder en tal sentido.

Endesa ha presentado siete proyectos alternativos para el paso de la línea aún soterrada sin obtener el visto bueno. Actualmente, insiste ante el juzgado con una alegación que mezcla dos procedimientos y autos: uno juzgado por el TSJC en Santa Cruz de Tenerife y que afecta, también, al Ayuntamiento de Candelaria por autorizar esta obra (asunto aún no resuelto judicialmente) y la sentencia firme que ordena el levantamiento de la línea.

El soterramiento de la línea eléctrica que enlaza el centro de transformación que había junto al colegio público Carmen Álvarez de la Rosa con los ubicados al lado del cementerio y la plaza del pueblo se realizó entre 2005 y 2006, con un presupuesto de 304.678,94 euros financiados, al 70%, por la Consejería de Agricultura del Gobierno de Canarias.

Esta actuación permitió desmantelar el tendido eléctrico de media tensión y las torres que iban desde la calle Los Asomaderos hasta el centro académico, el cementerio, el campo de fútbol, La Angostura y El Cercadillo.

Esta obra ocupó suelo en lo que se suponía era una propiedad pública, pero el vecino Juan Delgado Castillo reclamó su titularidad, algo que reconoció implícitamente la sentencia de 15 de marzo de 2010 del TSJC, que también ordenó "volver a la situación anterior" a los trabajos realizados en el espacio por donde fue enterrada la línea de media tensión.

En la actualidad, Juan Delgado mantiene paralizada la obra denominada "proyecto de encauzamiento y cubrición del barranco Los Santos, en Barranco Hondo" en su propiedad, "porque los trabajos se encuentran con el paso de la línea, con lo que se me está ocasionando un perjuicio mayor e inesperado". De hecho, la autorización otorgada por el Consejo Insular de Aguas de Tenerife (Ciatf) para culminar esta intervención expiró en mayo.