El Consejo de Gobierno de Canarias, a propuesta de la Consejería de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento, procedió ayer a la aprobación del decreto por el que acuerda la realización del proyecto de modificación de la línea aérea de alta tensión de 220 kilovoltios entre las estaciones de Caletillas (Candelaria) y el Polígono Industrial Granadilla de Abona, concretamente entre los apoyos T-0 y T-2 situados en las inmediaciones de la subestación de Candelaria.

El proyecto declarado de interés general y exento de evaluación ambiental, está promovido por Red Eléctrica de España (REE) y supone un paso previo imprescindible para la construcción de la nueva subestación de Caletillas, declarada, a su vez, de interés general en febrero del 2016.

Ambas actuaciones resultan necesarias para aumentar la garantía, calidad y seguridad del suministro en el sistema eléctrico de la isla de Tenerife, en concreto en la zona noroeste de la Isla, al conectar los nuevos ejes de 220 kV de alimentación a la zona metropolitana y norte de Tenerife con los ya existentes.

De esta manera, la nueva subestación de Caletillas se convertirá en el nudo concentrador y distribuidor de la red de 220 kilovoltios en la zona, permitiendo la reducción de la criticidad del nudo actual en la subestación de Candelaria.

El mismo decreto ordena el inicio del procedimiento de modificación del planeamiento afectado, en este caso, el Plan General de Ordenación (PGO) de Candelaria, dado el carácter no provisional del proyecto.

Esta subestación está llamada a suplir a la central térmica, que ya cumple 51 años con dos grupos de vapor de 40 MW, dos turbinas de gas de 37 MW y una de 17 MW. De forma directa e indirecta emplea a más de 200 trabajadores y genera una significativa actividad económica a través de la contratación de trabajos con las empresas de servicios de mantenimiento, apoyo y aprovisionamiento.