Una misa, una ofrenda floral y una oración musulmana sirvieron ayer para recordar que en el número 12 de la calle Amalia Alayón había un edificio cuyo colapso causó la muerte de siete personas. Siete nombres ayer mencionados: Flor González, asturiana de 71 años ; Antonio Jesús García Beltrán, tinerfeño de 55 años; Noemí Ruiz Rodríguez, gallega de 29 años; Hanan Mrabet, marroquí de 41 años; Graziella Fagnoli, italiana de 77 años; Alessandro Locatelli, italiano de 41 años, y Markku Tapinnen, finlandés de 72 años. También hubo tres heridos.
Ellos forman parte actualmente del grafitti que puebla el muro más visible desde la calle que tantas veces sonó durante semanas entre abril y mayo de 2016. Junto al ficticio árbol que adorna el espacio, ayer fueron depositadas las coronas de flores en homenaje y recuerdo de los fallecidos.
Algunos de los que allí vivían mostraron su interés por reconstruir el inmueble y hasta por promover la apertura de sus antiguos negocios. Mientras tanto, la incertidumbre sobre las causas que motivaron el suceso y la responsabilidad consecuente sigue creciendo. De momento, la Fiscalía descarta la petición de responsabilidades penales, señalando la vía civil como la adecuada para que los dueños de las viviendas y locales destruidos recaben una compensación. La causa penal está sobreseída.
A las 9:31 horas del 14 de abril de 2016 se produjo el veloz desplome del edificio Julián José en el solar que hoy es el número 12 de la calle Amalia Alayón, que alcanzaba hasta la trasera de la calle Valle Menéndez . De las 28 personas que habitaban en las 24 viviendas (también había tres locales comerciales) que formaban este inmueble de cuatro plantas -construido en 1972-, siete fallecieron y tres resultaron heridas.
Un total de 90 personas fueron desalojadas y realojadas por familiares o en hoteles, ?camping? y apartamentos del municipio, que cedieron sus instalaciones. Atención y realojo que también se prestó a familiares de las víctimas que se desplazaron al municipio desde otros países y de la comunidad autónoma.
Ayer, la iglesia de Nuestra Señora del Carmen acogió la misa aniversario, mientras que la mezquita Al-Muhsinin albergó la oración que ofreció la comunidad musulmana.
ARONA