La Consejería de Patrimonio Histórico del Cabildo de Tenerife que dirige Josefa Mesa ha impulsado por primera vez el desarrollo de los Planes Especiales de Protección de los conjuntos históricos de la Isla, con el inicio de los trámites para la aprobación de los primeros convenios de colaboración con los ayuntamientos que cuentan con ellos.

En concreto, el Área de Patrimonio Histórico invertirá casi 440.000 euros para los convenios de colaboración con los consistorios de Tacoronte, Icod de los Vinos, Güímar y Arona, aprobados según las solicitudes presentadas por los propios ayuntamientos, y por orden de antigüedad de su declaración de sus conjuntos históricos como Bien de Interés Cultural (BIC).

Estos convenios de colaboración se aprobaron en uno de los último plenos de la Corporación insular, que incluyen la redacción y desarrollo de los planes especiales de protección de los conjuntos históricos.

La consejera de Patrimonio, Josefa Mesa, explicó a EL DÍA que, aunque la puesta en marcha de estos planes es de competencia municipal, "se ha apostado por apoyar esta iniciativa dentro de la línea de colaboración que existe entre el Cabildo y los consistorios con conjuntos históricos, para que cuenten con una herramienta más a la hora de dinamizar sus cascos históricos y tengan un catálogo con el nivel de protección de sus inmuebles".

La financiación, ejecución de la redacción y desarrollo de los Planes Especiales de Protección de los Conjuntos Históricos están incluidos en la línea de actuación 4.8.1 del Plan de Patrimonio Histórico del Marco Estratégico de Desarrollo Insular (MEDI) del Cabildo, a través de la cual, la Institución insular aporta el 40% y los ayuntamientos el 60%.

En concreto, para el Plan Especial de Protección de Tacoronte se ha destinado una subvención de 120.000 euros; para Icod de los Vinos un total de 163.843 euros; 89.880 euros para Güímar y una partida de 64.200 euros para el municipio de Arona. La financiación la aporta tanto el Cabildo como los consistorios.

Con la tramitación para la aprobación de estos planes especiales, el Cabildo cumple además con el artículo 9-c) de la Ley 4/99 del Patrimonio Histórico de Canarias, que establece que es competencia de los ayuntamientos la formulación de los Planes Especiales de Protección (PEP) de los Conjuntos Históricos, con el objetivo de establecer las medidas de fomento necesarias para conseguir su preservación y revitalización.

La elaboración de estos planes especiales permitirá a los ayuntamientos poder ejercitar la autorización de las obras que afecten a inmuebles que no hayan sido declarados Bien de Interés Cultural, ni con expediente incoado, ni estén comprendidos en su entornos. Además, podrán formular y tramitar, según lo establecido por la normativa urbanística aplicable, el catálogo arquitectónico municipal, con el objetivo de tutelar y conservar los edificios y elementos de valor situados en su municipio, por lo que se agilizarán los trámites para los vecinos.

Josefa Mesa también destacó "el esfuerzo y la apuesta clara" que se realiza desde el Área por la conservación del patrimonio de Tenerife "codo con codo" con los ayuntamientos y con una ficha financiera por primera vez.

"Es una obligación de los ayuntamientos que cuentan con zonas declaradas como Bien de Interés Cultural (BIC) aprobar estos planes, además permite no solo proteger estos espacios, sino planificar su desarrollo y ponerlo en valor, para el turismo y desde el punto de vista comercial", recalcó. "En estos documentos se marcan las directrices de desarrollo futuro y todo aquello que se permite y lo que no", matizó Mesa.

Un plan especial es el documento urbanístico de desarrollo que define, amplía o protege las redes públicas o protege y conserva el patrimonio y los ambientes, espacios, perspectivas y paisajes urbanos o naturales.