La última actualización del Censo de Instalaciones Subterráneas, Galerías y Pozos de la Isla de Tenerife, publicada a finales de marzo en el Boletín Oficial de Canarias por el Cabildo de Tenerife, recoge la clausura definitiva de 115 galerías y pozos abandonados, así como una importante reducción de las instalaciones con niveles de riesgo alto o muy alto, que en 2008 eran 175 en toda la Isla y en 2018 son apenas 13 con riesgo alto y ninguna con riesgo muy alto.

Tras someter a información pública, en diciembre de 2016, la actualización del censo, el Consejo Insular de Aguas de Tenerife (CIATF) asegura que "continuó trabajando para intentar reducir el nivel de riesgo de todas aquellas obras censadas en riesgo alto. Para lograrlo, se localizó y notificó a los titulares de las obras en situación de riesgo alto o, en su defecto, a los propietarios del terreno".

En el caso de 22 obras de captación censadas en riesgo alto, tras completarse el procedimiento reglamentariamente establecido sin haber podido localizar ni a su titular ni al propietario del terreno, se solicitó a la Dirección General de Industria del Gobierno de Canarias su clausura definitiva.

El 13 de diciembre de 2017, la Dirección General de Industria notificó la clausura definitiva de 20 de estas obras.

A 31 de enero de 2018, este censo recoge un total de 2.013 galerías, pozos y galerías convencionales repartidas por la Isla de Tenerife, de las que 13 aún tienen un nivel de riesgo alto; 115 han sido clausuradas de forma definitiva; 355 tienen riesgo medio; 1.193, riesgo bajo, y 337 aún tienen un nivel de riesgo desconocido.

Las galerías y pozos con nivel de riesgo alto se ubican en los municipios de Adeje, Arafo, Granadilla de Abona, San Miguel de Abona, Santiago del Teide, El Rosario, La Laguna, Puerto de la Cruz y Los Realejos. En el caso de El Rosario, existen tres galerías con riesgo alto: Las Pasadillas, en Las Raíces, y Berros y Gavilanes 1 y 2.

Este censo tiene su origen en el decreto 232/2008 por el que se regula la seguridad de las personas en las obras e instalaciones hidráulicas subterráneas de las Islas Canarias, aprobado tras la tragedia de la galería silense de Piedra de los Cochinos, en febrero de 2007, donde murieron seis jóvenes.

las claves

El número total de pozos y galerías censados en 2018 en la Isla de Tenerife es de 2.013 instalaciones. En 2008 se contabilizaron 1.997 galerías, pozos y galerías convencionales.

Los niveles de riesgo se han reducido notablemente en la última década. En la actualidad no hay ninguna instalación catalogada con riesgo muy alto, mientras que en 2008 eran 43.

En la última actualización del Censo de las Instalaciones Subterráneas, Galerías y Pozos de la Isla de Tenerife se contabilizan un total de 337 obras hidráulicas con un nivel de riesgo desconocido. Según explica el Consejo Insular de Aguas de Tenerife (CIATF) en el anuncio de publicación de este censo, "las obras censadas con riesgo desconocido, que antes se incluían en la categoría de riesgo muy bajo, correspondiendo a captaciones que no han podido ser comprobadas por los técnicos, por encontrarse cubiertas por la vegetación, en el interior de propiedades privadas o que no han podido ser localizadas, entre otras razones".

Estas instalaciones con un nivel de riesgo desconocido aparecen por primera vez en el censo de 2018, ya que en 2008, 2010 y 2013 formaban parte de la categoría de riesgo muy bajo: 863 galerías y 311 pozos en 2008; 915 galerías y 318 pozos en 2010, y 994 galerías y 333 pozos en 2013.

En este último censo aumenta el número de galerías en situación de riesgo medio, debido también a "un cambio en el criterio de asignación, ya que, aunque la obra esté cerrada y señalizada, si en algún momento se ha detectado la presencia de gases en bocamina el nivel de riesgo se ha subido a medio".

Respecto al año 2008, en el que se elaboró el primer censo, el número de galerías con riesgo medio pasa de 230 a 335. En el caso de los pozos, pasan de 13 a 20 con riesgo medio.