Los Realejos vivió ayer la jornada más esperada de su amplísimo calendario festivo: el día de las cruces y los fuegos, una cita que los vecinos de Los Realejos preparan con mimo y esfuerzo durante meses y que financian con fondos propios, sin ayudas públicas para flores ni fuegos. Los realejeros sufragan, mediante la llamada "perra de la cruz" y otras actividades complementarias, la decoración de más de 300 cruces repartidas por toda la localidad y los miles de kilos de pólvora que, al paso de la cruz por las calles del casco, iluminaron anoche el cielo del Valle.

Esta fiesta está considerada de interés turístico regional y nacional, y desde 2015 el Ayuntamiento realejero pelea para obtener un reconocimiento internacional. Para lograrlo, el consistorio invitó este año a un equipo de RTVE, que elaborará un reportaje para el Canal Internacional de TVE, y a cinco corresponsales de medios de comunicación extranjeros que contarán cómo se vive el 3 de mayo en Los Realejos en países como Francia, México o Canadá.

Desde por la mañana, Los Realejos se llenó de vecinos y visitantes que disfrutaron del arte efímero y floral de la decoración de las cruces. Más de una veintena de guaguas de turistas llegaron a la localidad gracias al proyecto "Descubre Los Realejos". Un tren y varias guaguas transportaron gratuitamente a las personas interesadas en completar un recorrido por las principales cruces de La Cruz Santa y el casco, pasando por la avenida de Los Remedios, la calle La Pila, la calle Reyes Católicos, la carretera Nueva, la esquina de la calle Real o San Agustín.

A mediodía, la Parroquia Matriz del Apóstol Santiago acogió la eucaristía previa a la procesión diurna de la Santa Cruz, con su popular traca durante la entrada al templo. Este recorrido fue un adelanto de lo que ocurriría unas horas después, pasadas las diez de la noche, cuando la Santa Cruz volvió a salir a las calles realejeras a hombros de los cargadores de la calle El Sol. Sobre la raya que los une y los separa, la cruz pasó a manos de los cargadores de la calle El Medio, en uno de los momentos más intensos del día. Durante este recorrido nocturno tiene lugar el ancestral pique pirotécnico entras las calles El Sol y El Medio, una sana rivalidad que comenzó horas antes con la decoración de sus cruces. Las pirotecnias Hermanos Toste y Hermanos Caballer pusieron el arte y la pólvora que encendió el cielo sobre la cruz.

Realejeros y visitantes, desde calles, balcones y azoteas, disfrutaron de esta peculiar ofrenda de fuego que puso fin al intenso y esperado día de la cruz. La cuenta atrás para el 3 de mayo de 2019 ya está en marcha.

367 aniversario

La ciudad turística del Puerto de la Cruz vivió ayer una doble jornada festiva para celebrar el Día de la Cruz y el 367 aniversario de la que se considera el acta fundacional del municipio. Con decenas de cruces engalanadas por el casco y los barrios, Puerto de la Cruz colmó de flores tanto las cruces de pared como las que están recogidas en capillas e iglesias. Algunas de ellas con siglos de tradición, como la cruz que salió en procesión, anterior a 1620, y otras más recientes, como el Santo Madero de la popular "Placeta", que cumplió su 201 aniversario. Para el alcalde portuense, Lope Afonso (PP), la exaltación de la cruz y la ornamentación floral "enorgullecen y muestran con satisfacción el legado del municipio". Afonso fue protagonista en el acto de lectura de la Real Cédula de 28 de noviembre de 1648 del Rey Felipe IV, que se considera la carta fundacional de la ciudad, aunque no entró en vigor hasta el día 3 de mayo de 1651.