Más de ochenta años de historia, abandonado y con la esperanza de volver a ser lo que fue: así se encuentra el interior del antiguo edificio de Hacienda en Tenerife

A la espera de que se realice una rehabilitación integral, el edificio se encuentra abandonado

Tuvo que ser sometido a un proyecto de estabilización debido a un problema en su estructura

El escudo de la provincia de Santa Cruz de Tenerife en el interior del antiguo edificio de Hacienda

El escudo de la provincia de Santa Cruz de Tenerife en el interior del antiguo edificio de Hacienda / Ratatour

Víctor de Castro

Víctor de Castro

Tenerife guarda en su interior muchos rincones con una larga y amplia historia. Mucho se ha hablado de su patrimonio natural, pero en cuanto a edificaciones, la Isla alberga algunos edificios que se mantienen en pie tras decenas de años... y algunas se encuentran en completo estado de abandono. Santa Cruz, la capital de Tenerife, cuenta con varios de ellos, edificaciones que tuvieron varios usos y que ahora mismo se encuentran a la espera de que alguien les haga caso para, al menos, acercarse a la utilidad que tuvieron en su día.

En la zona de Ángel Guimerá podemos encontrar el antiguo edificio de Hacienda. Fue el hogar de CajaCanarias de 1940 a 1980, y también la sede de la Consejería nombrada del Gobierno de Canarias en la provincia de Santa Cruz de Tenerife entre 1980 y 2008. Ahora, es un inmueble que de puertas hacia fuera mantiene su firmeza con sus amplias cristaleras y con su famoso reloj en lo alto, pero en su interior solo alberga recuerdos de lo que fue.

Pese a que el Gobierno de Canarias trabaja en un proyecto para reabrir este edificio y dotarlo de las condiciones necesarias para desempeñar de nuevo trabajos administrativos del ente que rige las Islas, en estos momentos continúa abandonado. Fue sometido a un proyecto de estabilización para mantenerlo en pie debido a un problema en su estructura y, gracias al creador de contenidos Ratatour, hemos tenido la oportunidad de ver cómo se encuentra el interior del mismo.

Nada más entrar, pese al deterioro de las paredes, se puede observar en las columnas el proyecto de estabilización que se llevó a cabo hace unos años. En su interior, como explica Ricardo, se mantienen las columnas originales, pero revestidas por una nueva columna a su alrededor.

El interior de la cámara blindada

El interior de la cámara blindada / Ratatour

Una puerta blindada

En un edificio de esas características, es normal encontrar algunas estructuras peculiares. Una de ellas es una caja fuerte de gran tamaño, que todavía mantiene la puerta y el mecanismo para abrir la cámara blindada desde su interior, por si ocurriese un accidente y se cerrara con gente dentro. Este lugar tiene todo el sentido del mundo si recordamos que fue sede de CajaCanarias y de Hacienda.

Muchas habitaciones se encuentran vacias, mientras que otras mantienen cierto mobiliario. En algunas de las estancias se pueden encontrar distintos símbolos: por ejemplo, el escudo de la provincia de Santa Cruz de Tenerife colgado en la pared, o una bandera del Archipiélago hecha jirones. En este Ratatour se puede ver el estado de lo que queda del salon de actos o del anfiteatro del edificio.

El edificio, que consta de nueve plantas y ocupa 4.300 metros cuadrados, se encuentra en muchos lugares a ladrillo visto. Desde los ventanales de su último piso se puede contemplar la expansión de Santa Cruz por un lado, y por el otro el puerto de la capital.

El reloj y las campanas

Desde el exterior, en la parte alta del edificio se puede ver el reloj coronando la edificación. Un reloj que no se encuentra en funcionamiento, pero que en su interior mantiene el mecanismo que lo hacía dar la hora a todos los tinerfeños en pleno centro de Santa Cruz.

Antiguo edificio de Hacienda, en Santa Cruz de Tenerife. | | E.D.

Antiguo edificio de Hacienda, en Santa Cruz de Tenerife / E. D.

Esta maquinaria se remonta a los principios del edificio, cuando era sede de CajaCanarias, y mantiene su estado y su ubicación natural. Con todo esto, no es lo único que sobrevive de aquel entonces. En la parte más alta del edificio, aún se conservan las campanas que sonaban en algunos momentos del día.

En ellas, las inscripciones delatan su origen y su año de creación: Viuda de Murua, 1956. Esta empresa, que data su nacimiento en 1854, se encargaba de crear relojes y campanas de la mano del artesano campanero y relojero Ignacio Murua. El propio Ricardo muestra como, golpeando la campana, el sonido se mantiene pese a no sonar desde hace decenas de años.

Campanas en lo alto del antiguo edificio de Hacienda

Campanas en lo alto del antiguo edificio de Hacienda / Ratatour

En el final del vídeo, el creador de contenidos recoge distintas estancias del edificio: una garita donde se conservan viejos televisores, la entrada o las escaleras principales. Estas últimas conservan parte de su esplendor pasado, con distintas cornisas y detalles en las paredes y escalones. En la garita se pueden observar detalles que nos muestran una de las últimas veces que estuvieron ahí, como un periódico de EL DÍA que data del año 2010.

Una muestra más del patrimonio tan grande que se encuentra en Tenerife. En este caso, en su capital, en Santa Cruz, un lugar que ha vivido tiempos mejores y para el que todavía queda un ápice de esperanzas a la espera de una rehabilitación integral que se espera dar por finalizada antes de marzo de 2026.