El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha dado la razón a David Huerta, un agente de la Unidad de Caballería de la Policía Nacional en Valencia que solicitó quedarse con Unicornio, el caballo con el que trabajó durante varios años. "El vínculo entre nosotros es grande" cuenta David en declaraciones a EFE "son muchas horas cada día montándole y cepillándole".

Confiesa que para él "era importante darle una buena jubilación" a Unicornio porque, según cuenta "es un caballo muy noble, muy leal, juguetón y es uno de los mejores caballos que ha tenido la Unidad en Valencia".

David trabaja con Unicornio para que pueda participar en terapias para personas con diversidad funcional, autismo o síndrome de Asperger. "Lo peor de todo el proceso ha sido la espera, han sido cuatro años esperando y se han hecho muy largo, pero estoy muy satisfecho porque se ha hecho justicia", concluye David.