38 millones de euros para acondicionar la carretera del Teide que conecta ocho barrios de La Orotava

La inversión pretende mejorar la seguridad del tramo de siete kilómetros de la TF-21 que conecta núcleos urbanos del municipio, desde Hacienda Perdida hasta Aguamansa

Foto de familia con los vecinos y vecinas de La Orotava.

Foto de familia con los vecinos y vecinas de La Orotava. / El Día

Una carretera sin luz, con curvas cerradas, sin aceras ni arcenes y con un trazado sinuoso: así es la carretera insular TF-21 que permite el acceso al Parque Nacional del Teide y por la que se conectan ocho barrios del municipio de La Orotava. Tras quince años de espera, por una obra inacabada, el acondicionamiento del tramo comprendido entre Hacienda Perdida y Aguamansa comienza a ser una realidad. El Cabildo de Tenerife firmó este miércoles un convenio con el Ayuntamiento de La Orotava por el que se mejorarán las condiciones de esta parte de la vía de casi siete kilómetros. En el acuerdo se establece una aportación de 38,7 millones de euros por parte del Cabildo. Por su parte el Ayuntamiento de La Orotava pondrá 4 millones de euros. 

“Es la inversión más importante que tiene este año el órgano insular”, aseguró la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila. Con ello quiso mostrar su compromiso con el municipio norteño durante la firma del convenio, esta mañana, en el Salón Noble del Cabildo junto a Francisco Linares, alcalde de La Orotava; Vicente Pacheco, representante vecinal y 25 vecinos en representación del municipio.

La carretera cuenta con 82 kilómetros y atraviesa la Isla desde La Orotava hasta Granadilla. El objetivo del convenio se centra en estos siete kilómetros que atraviesan zonas habitadas en La Orotava. Por esta vía se desplazan a diario una media de cuatro mil vehículos en condiciones que los vecinos y vecinas del municipio norteño tachan de “muy inseguras”. El tramo conecta los núcleos urbanos de Barroso, Colombo, Cañeño y Camino de Chasna.

Aunque se trata de una carretera insular importante por la que transitan miles de habitantes al día no cuenta con medidas básicas de seguridad como aceras, arcenes o alumbrado. Por este motivo las medidas que se contemplan en la firma del convenio son: renovar la señalización horizontal y vertical, mejorar las paradas de guagua, mejorar la accesibilidad, ejecutar la instalación de alumbrado público, saneamiento y telecomunicaciones, solucionar las deficiencias del trazado geométrico para dar cumplimiento a la normativa y llevar a cabo una rehabilitación estructural del firme.

“Por suerte no ha habido ningún accidente grave durante estos años”, afirmó Francisco Linares, alcalde de La Orotava. Al mismo tiempo comentó las dificultades a las que se enfrentan quienes transitan por la vía. Él mismo la conoce de primera mano y asegura las situaciones complejas a la que los conductores se ven sometidos como la poca visibilidad.  

Reivindicaciones constantes de los vecinos

La TF-21 es una de las tres carreteras que conecta con el Parque Nacional del Teide junto con la carretera este, la TF-24, que parte de La Laguna hasta el Portillo de la Villa y la TF-38, de Chío a Las Cañadas. El espacio natural reúne a más de cuatro millones de turistas al año. En este sentido, resulta cotidiano que transiten por esta carretera insular miles de guaguas turísticas al año. Para los conductores supone tener que arrimarse hacia los lados o hacer maniobras complejas dando marcha atrás con el objetivo de dejar pasar a estos vehículos pesados.

Por su parte Vicente Pacheco añadió que “los vecinos siempre han estado reivindicando mejoras en esta carretera”. El representante añade que han habido quejas vecinales por rotura de vehículos, la inseguridad con la que circulan y la cercanía de colegios por esa zona, por lo que se pone en riesgo la seguridad no solo de conductores, sino de los peatones. 

Para el alcalde, que no haya habido accidentes graves ha sido “cuestión de suerte”. Con el convenio que este miércoles firmó junto con la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila; con el representante vecinal Vicente Pacheco y con 25 vecinos en representación del municipio, asegura que se “pone fin a esa suerte”. En su lugar, la carretera mejorará la seguridad de la circulación a través de la corrección geométrica de los elementos de trazado y la mejora del pavimento. Esto se resume en creación de aceras, arcenes, colocación de iluminación y una mejor señalización que pretende dar un alivio a la sensación de intranquilidad con la que conducen y transitan los habitantes de estos ocho barrios. 

Con el convenio ya firmado entre las dos partes los vecinos están más optimistas ante unas obras que se tendrían que haber completado hace quince años. Pacheco añade que estiman que la obra comience dentro de un año y medio y que finalice en 2028.

Por su parte Rosa Dávila aprovechó para recordar que la firma del convenio señala un día histórico. “Es importantísimo para la isla de Tenerife y sin lugar a dudas, importante para los pueblos y barrios”, concluyó.