Adiós a la suciedad pegada: descubre los mejores trucos para limpiar el horno de forma fácil y rápida.

Mantener el horno limpio es esencial. Un horno limpio no solo mejora la calidad de los alimentos que cocinas, sino que también prolonga la vida útil del electrodoméstico. La acumulación de grasa y restos de comida puede afectar el rendimiento y provocar malos olores.

Limpiar el horno regularmente evita la proliferación de bacterias y reduce el riesgo de incendios causados por restos de grasa acumulada. Además, un horno bien cuidado funciona de manera más eficiente.

Para mantener este electrodoméstico en condiciones óptimas, es recomendable limpiarlo al menos una vez al mes para mantenerlo en óptimas condiciones. Si usas el horno con frecuencia, considera limpiarlo cada dos semanas.

Métodos naturales para limpiar el horno

Existen distintos métodos naturales para limpiar el horno. Aquí te dejamos una lista de los métodos más eficaces para mantener el horno limpio:

• Vinagre: es un limpiador natural con propiedades antibacterianas y desinfectantes. Para una limpieza rápida, llena una bandeja con agua caliente y vinagre, y calienta el horno a 200 grados durante 30 minutos. El vapor de vinagre aflojará la suciedad, facilitando su eliminación con un paño húmedo.
• Bicarbonato de sodio: es ideal para desinfectar y desengrasar. Mezcla bicarbonato con vinagre para crear una espuma limpiadora. Aplica esta mezcla en las zonas sucias del horno y déjala actuar por unas horas. Luego, aclara con agua.
• Pasta de bicarbonato y agua: haz una pasta con bicarbonato de sodio y agua para las manchas más difíciles. Aplica la pasta en las áreas sucias y déjala reposar toda la noche. Al día siguiente, retira la pasta con un paño húmedo.

Pasos para una limpieza eficaz

Antes de limpiar, retira todas las rejillas y bandejas del horno. Limpia los restos sueltos de comida con un paño seco o una espátula.

Aplica la solución de vinagre o la pasta de bicarbonato en las paredes y el fondo del horno. Deja actuar el tiempo necesario para que los ingredientes desincrusten la suciedad.

Después de limpiar, seca todas las superficies con un paño limpio para evitar la acumulación de humedad. Es importante mantener el horno seco para prevenir la oxidación y la formación de moho.