Rosa Dávila propone un gran pacto por la movilidad en Tenerife

Rosa Dávila, presidenta del Cabildo de Tenerife, propone un gran pacto por la movilidad en la Isla con el transporte público gratuito de guaguas, tranvías y futuros trenes, como eje de un acuerdo que involucre a toda la sociedad, incluidos los grupos políticos que forman la Corporación insular. Es una de las principales conclusiones del pleno celebrado ayer sobre la Orientación General de la Política Insular, eufemística denominación del conocido como Debate sobre el estado de la Isla que coincide con el primer año de mandato (2023-2027) del gobierno insular de Coalición Canaria y el Partido Popular. 

¿Cómo está la Isla? Según opina algún consejero, con cierta sorna, más o menos. Acierta en valorar esas luces y sombras, pero se hace necesario acercar el foco. El resultado es equivalente a más para el ejecutivo que encabeza la primera presidenta del Cabildo en toda su historia, Rosa Dávila. Esta glosó en más de una hora y 40 páginas la realidad de casi 365 días de gestión con reiteradas referencias a «la herencia de parálisis e inacción» del mandato anterior de PSOE y Cs– la «muleta» para el portavoz nacionalista, José Miguel Ruano–. Lope Afonso (PP) corroboró, matizó, recordó y expuso lo realizado en las áreas bajo la responsabilidad de los ocho consejeros populares.

La ecuación del balance da un menos para la casi única oposición socialista, cuyo portavoz, Pedro Martín, defendió la labor realizada durante su presidencia (2019-2023). Las intervenciones de Vox desde el Grupo Mixto, con la voz de un solitario Naím Yánez –ayer faltó su compañera Ana Salazar al igual que otros tres consejeros– mostró casi siempre, con la salvedad de los asuntos relativos a la inmigración, cercanía a los postulados de los dos partidos que forman el Pacto del Hotel Escuela (allí conmemoran el próximo martes el primer aniversario) para un solo gobierno. «Estable, moderado y que responde a una mayoría social» como los definieron ayer sus representantes.

El debate, sosegado y tranquilo en la forma pero con ese fondo de mano tendida, que oscila entre apretar la del contrario o darle un cogotazo, tuvo algún momento de duro intercambio dialéctico entre Rosa Dávila y un Pedro Martín, con el diapasón algo bajo, con base en el manido «y tú más». O menos, según el caso. La realidad es que la presidenta ocupó el centro con los cuatro portavoces en un papel secundario en medio de una oratoria algo pobre, como es habitual en una sesión soporífera por momentos. Cosas de la estructura que marca el reglamento. 

Abrió la sesión el discurso de Dávila, plagado de críticas y alusiones al anterior gobierno. Defendió que «Tenerife vuelve a estar en marcha con un pacto sólido, que genera confianza». Esbozó los principales ejes de sus políticas insulares: movilidad, apoyo a las familias, protección del territorio y sostenibilidad, así como revitalizar y dinamizar a la Isla tras «la hibernación en el invierno de los cuatro años anteriores». Recalcó que «estamos haciendo cambios reales». Resaltó, entre otras muchas cifras, el crecimiento del PIB insular en un 3% y la creación de más de 5.000 empleos en sectores claves como el turismo –coincidió con Lope Afonso, que gestiona el área, en que es y seguirá siendo el motor económico– y la tecnología con especial incidencia en el nuevo área de Industria como posible sector generador de la diversificación económica.

La presidenta mencionó que «en este debate, veremos a un Grupo Socialista que prometió mucho, pero que nadie recuerda que hiciera nada concreto». Dávila dijo a manera de concusión que «ya hemos arrancado el motor de este buque insignia de Canarias –Tenerife–, que estuvo en astilleros cuatro años paralizado por falta de iniciativa o de ganas. La Isla vuelve a estar en marcha».

Movilidad

Dávila propuso un gran pacto por la movilidad en Tenerife y reiteró su apuesta por el transporte público gratuito y los trenes sostenibles al Norte y al Sur. La presidenta resaltó la implementación de una serie de acciones «valientes, viables y sostenibles». La oposición le afeó que no cumpliera su promesa electoral de «acabar con las colas en el tráfico en 90 días». Respondió con que el Cabildo trabaja en más de 20 actuaciones necesarias en carreteras, incluyendo la repavimentación de la TF-1 o nuevos accesos en el enlace de Guamasa. El cierre de este último fue objeto de la crítica socialista.

Control de satélites

La presidenta valoró que Tenerife sea la sede del primer centro de control de satélites –66 de comunicación– en Canarias, que atraerá una inversión de 300 millones de euros. Valoró el presupuesto global destinado a I+D+i que ha aumentado un veinte por ciento. En su larga exposición, Rosa Dávila enumeró logros en este año transcurrido y anuncios para los que restan de mandato. Indicó que «el Cabildo tiene los presupuestos más verdes de su historia» y reafirmó el compromiso con la conservación del medio natural y la sostenibilidad territorial y demográfica. No perdió la ocasión de criticar la gestión ambiental del anterior gobierno en «el descontrol en la protección del Teide y otros espacios naturales como Anaga y Teno», así como «en la ineficaz gestión» del Complejo Ambiental de Arico «con los niveles más bajos de reciclaje en 2023». Para ella «ha sido un gran año en Sanidad». Anunció que el HUC contará con nuevas unidades de medicina preventiva, paliativos y geriatría. También se comprometió a llegar al final del mandato a 6.000 familias con el cheque-guardería frente a las 1.500 beneficiadas en su primer año de puesta en marcha. Completan este panorama «la reapertura el próximo verano del Refugio de Altavista», el dato de que «se ha duplicado el presupuesto en formación y empleo» o que «Tenerife tiene la tasa de paro más baja de los últimos 18 años». Mientras Lope Afonso (PP) y Ruano (CC) reforzaron este discurso Vox y el PSOE pusieron el contrapunto. 

Otra óptica

Naím Yánez criticó un discurso de «corta y pega» de las ruedas de prensa «que hemos sufrido en los últimos meses». Valoró que se ha avanzado poco a nada en los compromisos. Cree que la presidenta vive en «un mundo de rosa» y le advierte de que «la decepción está a pie de calle, no hay ilusión». Mostró la misma sintonía en los asuntos domésticos con CC y PP que diferencias en los de trasfondo ideológico como los de la emigración, los colectivos LGTBIQA+ o la violencia de género. Martín se refirió a que este año «hemos escuchado titulares, anuncios y demagogia». Achacó a Dávila no haber mencionado sino «de pasada y media hora después de empezar»el «gran problema de los tinerfeños que es la vivienda». Aclaró que «no decimos que todo lo que han hecho otros es malo». Se enzarzó con la presidenta sobre las obras del Anillo del Padre Anchieta y llegó a decirle que «se hace fotos con cada pieza de metal que llega al puerto». 

Votaciones

Después de alguna duda sobre si votar las propuestas una a una o por bloques, que resolvió el secretario, se pasó a la parte decisoria aunque en su mayoría son iniciativas para instar a otras administraciones. Se aprobaron 32 de las 40 presentadas, diez por grupo, algunas por unanimidad y oras con mayoría. Las diez de CC se refieren a igualdad, recursos humanos, incentivos culturales, transporte público guiado, promoción de talleres de artesanía, formación financiera de los jóvenes, programas de educación para la prevención, una base permanente de helicópteros y la reforma del REF. El PP se vio apoyado en potenciar el sistema eléctrico, fortalecer al Sector Primario, una Ley de ELA, el Plan de Mayores –Afonso anunció que estará en julio–; modificar la Ley de Vivienda estatal, mecenazgo deportivo, retorno de la momia guanche, más servicios de aduana, la aprobación del Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del Parque Nacional del Teide y la modificación de la Ley de Extranjería.  Vox sacó adelante nueve iniciativas referidas a Movilidad, Sector Primario, Turismo Patrimonio Cultural, Educación, Sanidad, Juventud, Vertidos y residuos, además de Acceso a la vivienda y alquiler social. Tres propuestas del PSOE se aprobaron: obras de Carreteras, recursos residenciales para tratar el Alzehimer, y apoyar a las producciones y el consumo sostenibles. El consejero del principio volvió a afirmar después de 5 horas, 12 minutos y 34 segundos: ¿Cómo esta la Isla? Más o menos».